jueves, 26 de febrero de 2015

Murillo

Bartolomé Esteban Murillo nació en Sevilla en 1617, donde vivió hasta su muerte en 1682. Fundó una prestigiosa escuela de arte en 1660. Su obra fue muy amplia y variada, siendo en su mayor parte de tema religioso. También pintó delicadas escenas de niños, adolescentes y minuciosos retratos. Su pintura, basada en el estudio de la escuela italiana y flamenca, se adaptó al gusto y la devoción de su país, llegando a ser un pintor de gran prestigio y consideración. Murillo se convertirá en uno de los principales pintores infantiles del Barroco, tanto a la hora de representar figuras divinas, como el Niño Jesús o personajes absolutamente reales.


 

Murillo en el Prado

Nos centramos en la obra: "Niños jugando a los dados".





Esta obra es un óleo sobre lienzo (140 x 108 cm), que constituye una pintura representativa del Barroco español. En ella, los gestos de los muchachos están perfectamente caracterizados, especialmente el que echa los dados cuyo rostro está parcialmente iluminado por la rica y dorada luz. Una línea diagonal une las tres cabezas de los niños, mientras que alrededor del centro de atención -los dados- Murillo ha creado un círculo donde se integran gestos y actitudes. El pintor sevillano introduce una atmósfera vaporosa creada por las luces cálidas y la armonía cromática de pardos, blancos, grises y ocres, obteniendo un resultado de gran calidad y belleza protagonizado por las actitudes desenfadas y vitales de los muchachos. Dos de los chiquillos juegan a los dados en posturas encontradas y un tercero come una fruta mientras que un perro le mira. Se supone que se trata de vendedores de fruta o aguadores debido a la presencia en primer plano de una canasta con fruta y una vasija de cerámica, jugando las escasas monedas conseguidas. Todos los detalles están realizados con una impronta claramente naturalista. El lienzo aparece documentado en 1781 en la Hofgartengalerie de Múnich donde fue adquirido a principios del siglo XVIII para la Colección Real Alemana.

domingo, 22 de febrero de 2015

Formulario

Kandinsky

Vasily Kandinsky (1866-1944) nació en el seno de una familia rusa acomodada. Sus padres le alentaron hacia el arte, proporcionándole una esmerada educación que potenciara su talento innato. Sin embargo, no emprendió su carrera artística hasta 1896, a la edad de 30 años. Se trasladó a Múnich para estudiar arte.
El tratado De lo espiritual en el arte, publicado por Kandinsky en 1911, sentaría las bases teóricas de su proyecto artístico y marcaría el comienzo de su evolución hacia la abstracción no-figurativa.




Nos centramos en la obra: "Paisaje con lluvia"



La obra de Kandinsky de este período muestra un distanciamiento con respecto al objeto, como vemos en Paisaje con lluvia (Landschaft mit Regen), (1913), donde el tema de la pintura se plasma más en el título que en la propia imagen. Para Kandinsky, el color podía suscitar una profunda emoción espiritual, y comparaba la resonancia o el “sonido” interno de cada elemento pictórico con la de un instrumento musical. El cuadro, como otros pintados en la misma época, se caracteriza por la articulación de gruesas líneas negras con vivos colores y en ellos se percibe todavía un poco la presencia de la realidad.